lunes, 10 de noviembre de 2008

Crisis de placard vol. I

Hugo Chavez definió a la crisis como el momento que algo viejo está muriendo y algo nuevo está naciendo. Y nuestro placard, como la vida misma, no está excento de las embestidas de las transiciones.

Al menos dos veces al año nos toca cambiar de temporada. Y así como la ropa de otoño/invierno tiene que dejar lugar a la de primavera/verano, las sandalias tienen que salir del mismísimo fondo del closet para pasar a ocupar los primeros lugares en nuestra fila de calzado.


Suele ocurrir en estos casos que escarbando entre los zapatos encontramos pares que jamás recordaríamos haber adquirido.

Algunos tips para agilizar esta parte del placard:

  • guardar siempre los pares de zapatos en sus cajas. ¡No tirarlas nunca! es mejor tener menos espacio para guardarlos que tener una montaña de calzado enredado, aplastado y llenos de tierra. Una opción más avanzada es proveerse de algún mueble específico para zapatos.
  • etiquetar las cajas. Es más facil que abrir una por una buscando ese par que queremos usar. Poner una foto quizás es demasiado fanatismo del orden, pero no está demás saber que se puede, se puede.
  • en lo posible, guardar los zapatos limpios y lustrados. Por lo general, nos vestimos a último momento antes de salir y ya no hay tiempo para buscar el betún, el cepillo, el qué se yo.
  • Y lo más importante: saber desprendernos de aquellos que sabemos jamás volveríamos a usar. Esas sandalias de cuero romanas con suela ínfima compradas a un artesano hippie 6 años atrás ¡por favor! nunca jamás.

1 comentarios:

LYDIA dijo...

apoyo ese nunca jamas,y tambien soy partidaria de renovar fieles calzados,como las clasicas zapas de lona.


suerte con el inventario de temporada!